Diseño y un diseñador

Hace algunos meses en un día que no tenía nada que hacer (raro en mí), me encontraba mirando un video acerca del proceso de fabricación de los billetes en México.

 

Me sorprendieron muchas cosas, como la facilidad con que la maquina los imprimía como si se trataran de simples folletos, o las cantidades de dinero que se juntaban en un metro cubico, miles de millones de pesos hasta casi el billón, dependiendo de la denominación de los billetes claro está; pero también la seguridad que eso implicaba, no todos los billetes terminados salen a circulación al final se someten a una exhausta revisión para así desechar los que tuvieran alguna falla mínima, además cuantas personas no se verían tentadas a tomar un billete de los miles de millones que hacen, total uno más o uno menos quien se daría cuenta. Aunque a esto no iba, sino que lo más atractivo para mí como practicante del diseño fue una cosa, el diseño del billete, jamás me había puesto a pensar ¿a quien se le ocurrió hacer así el billete?  ¿por qué es así o como lo hicieron?, yo creo que cuando uno tiene el dinero en las manos lo que menos le viene a la mente es eso, pero eso me abrió un poco el panorama, me hizo ver que tan importante se ha vuelto el diseño en nuestras vidas, la mayoría de las cosas que tenemos o vemos a nuestro alrededor tuvieron un diseño previo, en algunas cosas se nota o se habla del diseñador como con las grandes firmas de ropa, o en nuestro caso la arquitectura, pero en muchas ocasiones no nos pasa ni el más mínimo pensamiento sobre quien hace las cosas, no tanto refiriéndome a nombres sino de que existe alguien que se dedica a hacer lo que nosotros vemos o llevamos en nuestras manos, por ejemplo los celulares, nuestras libretas hasta una simple pluma, todo o la mayoría fue concebido por alguien, diseñado y fabricado.

 

Por lo que la próxima vez que tengamos algo en las manos hay que valorarlo más, así sea por un simple detalle, porque detrás hubo alguien que le dedico minutos, horas o hasta días para que fuera de nuestro uso, de no hacerlo sería como olvidarnos de nosotros mismos que también diseñamos para otros.

Aporte de: Valdovinos